CERTIFICADO

LO ULTIMO

Lo Último

viernes, 4 de diciembre de 2015

"ASÍ ACTUARON LOS PROFESIONALES DE EMERGENCIAS EN LA MASACRE DE PARÍS."

Tan sólo han pasado tres semanas desde el 13 de noviembre, el fatídico día en el que tuvieron lugar los atentados de París y ya se ha publicado el primer análisis de la actuación de los equipos de emergencias. La revista médica The Lancet relata, en exclusiva, los testimonios de diferente personal sanitario que participó en la asistencia a las víctimas del atentado.



El sistema de emergencias comenzó con la activación urgente del que llamaban White Planque tal y cómo cuentan los autores del artículo “fue desarrollado hace veinte años, pero ha sido la primera vez en la que nos hemos visto obligados a activarlo”. Esto, prosiguen “fue una decisión de suma importancia donde el tiempo es clave, haber actuado demasiado tarde hubiese restado efectividad al plan”. Además muchos de los profesionales que trabajaron para auxiliar a las víctimas del atentado, contaban con experiencia en gestión de crisis de emergencia por haber colaborado ya en los ataques a la redacción de Charlie Hebdo.

Gracias al gran trabajo de coordinación entre profesionales sanitarios, se pudieron salvar muchas vidas y asistir en tiempo récord a todas las víctimas de la catástrofe. Así lo describen los profesionales que participaron activamente en el atentado y que lo han plasmado en el impactante artículo.

El equipo de emergencias

Según describen los autores del artículo, un equipo de crisis se formó en los minutos después de que sucediesen las bombas en el Estadio de Francia, la unidad de crisis del SAMU (servicio de emergencias de la ciudad de París) envió trabajadores sanitarios a los lugares donde tuvieron lugar los ataques terroristas. Acudieron rápidamente ocho unidades de la región de París, la brigada de bomberos de la villa y también diversos equipos de rescate. Un organizado equipo de crisis, formado por 15 individuos para contestar las llamadas y cinco profesionales sanitarios, contaba con una prioridad, organizar las intervenciones de emergencia. Objetivo que se superó con creces, ya que gracias a este efectivo sistema, 265 personas heridas fueron transferidas a hospitales en tiempo récord y a mitad de la noche 35 equipos quirúrgicos habían conseguido operar las heridas de más gravedad.

Como las heridas fueron principalmente de bala, se aplicó estrategia prehospitalaria de control de daños, que es la aplicación civil de la medicina de catástrofes, especialidad utilizada normalmente en tiempos de guerra. “Esta estrategia se caracteriza por contar con un gran número de víctimas y recursos escasos. El desequilibro entre número recursos y número de víctimas implica rapidez de actuación y entrenamiento” tal y como declara a diarioenfermero.es Juan Carlos Gómez, enfermero experto en urgencias del Consejo General de Enfermería. El control de daños conlleva realizar técnicas como mantener la presión sanguínea al mínimo, utilizar torniquetes, vasoconstrictores y prevención de bajadas de temperatura. Hubo que realizar tantos torniquetes que “los participantes en los equipos móviles volvieron sin cinturones” relatan los profesionales de emergencias que han participado en la redacción del artículo.

La rapidez en la actuación de estos profesionales no fue una situación fortuita, ya que “desde enero de 2015 todos los departamentos de emergencias conocían que un atentado con disparos en diferentes lugares iba a tener lugar y a pesar de que la policía los servicios de inteligencia evitaron diferentes ataques, la posibilidad seguía existiendo”, por lo que los equipos del SAMU llevaban entrenándose desde hace dos años, desarrollando protocolos de tratamiento para poder reaccionar ante una situación de este calibre. Tanto es así, que la misma mañana de los atentados, el SAMU y el equipo de bomberos habían participado en un simulacro de un atentado múltiple en París y muchos sanitarios que se enfrentaron en un primer momento a la realidad, creyeron que se trataba de un nuevo ejercicio de simulación.

Para estar correctamente preparados para una situación de este calibre, “conocer la experiencia de los atentados del 11M en España ayudó a tener en cuenta un modo efectivo de reaccionar ante atentados múltiples” declara a diarioenfermero.es Antoine Lafont, principal autor del artículo en The Lancet y profesor de cardiología en el Hospital Georges Pompidou, aunque tal y como relatan a la publicación británica “ninguna simulación había anticipado un grado tal de violencia. A pesar de contar con formación de más de 30 años en medicina especialista en desastres, los profesionales nunca se habían enfrentado a un número tan elevado de víctimas y nunca habían tenido que realizar tantas operaciones de urgencia, por lo que tras esta experiencia, un nuevo umbral se ha cruzado”.

Una colaboración conjunta

La conclusión que se extrae de unos testimonios como los descritos en la revista The Lancet, es que para el correcto funcionamiento del sistema sanitario, es esencial la colaboración conjunta de todos los profesionales sanitarios, tanto enfermeros, médicos, anestesistas o expertos en traumatismos; que el entrenamiento a través de simulacros y el aprendizaje en gestión de crisis es esencial, para que, cuando hay que lamentar sucesos de este calibre, por lo menos, puedan contribuir a contar el menor número de víctimas posible.




No hay comentarios:

Publicar un comentario